Si tú felino está estornudando de manera continua, pero no le hayas algún otro síntoma, principalmente no te inquietes; ya que probablemente sean simples estornudos que no se vinculan con algún inconveniente, así como le sucede a las personas.
Pero en muchas ocasiones, la situación puede ser diferente. Si tu querido felino tiene mucosidades, hasta en los ojos y se la pasa estornudando, es una circunstancia anormal. Puede que tu felino esté resfriado, pero también puede ser algo muy grave.
Gato Que Estornuda Y Tiene Mocos
Sí cuándo tu felino está estornudando, expulsa mucosidades muy amarillas o hasta con sangre, la situación es muy alarmante, y ahora sí vas a tener que intervenir. Puede que la causa de todo esto sea una infección en el espacio respiratorio superior y no sólo sea un resfriado.
Síntomas
Si crees que tu gato está resfriado, estos pueden ser los síntomas del padecimiento:
- – mi felino estornuda demasiado y tiene muchos mocos
- – mi felino estornuda y tose demasiado
- – mi felino tiene bastantes mocos y líquidos
- – mi felino tiene mucosidades acompañadas de sangre
- – mi felino se le dificulta respirar, y cuando lo hace se escucha demasiado.
- – los párpados de mi felino se encuentran muy hinchados y permanece con los ojos casi cerrados durante gran parte del día
- – mi felino tiene fiebre, muchas ganas de dormir, no quiere comer ni jugar y se la pasa escondido para que no lo incomoden
Infección del tracto respiratorio en felinos:
¿Qué es el causante de tal infección en los felinos? En muchas ocasiones esta enfermedad empieza porque el felino sufrió mucho frío, y a esto le persigue infecciones bacterianas o infecciones virales en su área respiratoria, beneficiándose del estado del felino.
Felinos que tienden más a sufrir es de padecimiento:
- – felinos recién nacidos
- – felinos de muy vieja edad
- – felinos que sufren de padecimientos crónicos
- – felinos que sufran padecimientos inmunosupresores como la leucemia gatuna
Muchos se preguntarán ¿el hecho de que un felino tenga muchas mucosidades puede ser mortal? Y la respuesta es muy simple, sí. Cuándo un felino sufre de tal infección, no tiene tratamiento y se encuentra en el conjunto que fue mencionado anteriormente, puede morir.
Tratamiento
1) principalmente, acude con el veterinario lo antes posible. En muchas ocasiones, este padecimiento requiere de medicamentos para que el felino pueda superar tal infección. Si no lo llevas a tiempo, el padecimiento se puede hacer crónico y sería muy difícil superarlo, o como ya se mencionó anteriormente, podría ser mortal.
Cuando vayas, el experto te va a dar un diagnóstico para tu felino, debido a que aparte de la infección dicha, probablemente tenga otra enfermedad con síntomas bastante parecidos, como contaminaciones por hongos, calcivirus gatuna o herpesvirus gatuna.
2) si posees más gatos en tu hogar, apartalos del felino que se encuentra contagiado, ya que los otros se pueden contagiar.
3) siempre limpia la nariz y los ojos de tu felino. conservarlos limpios de mucosidades y lagañas, debido a que en estos se encuentran muchos microbios y virus que pueden hacer que tu felino se infecte de nuevo. Para limpiar las mucosidades de un felino, usa algodón, ya sea mojado o seco. Tienes que hacer esto las veces que sea necesario, ya sean varias veces al día.
4) conserva a tu felino en un área calmada y calida, evita que agarré frío frío; haz que tome agua, debido a este padecimiento puede tener como síntoma la deshidratación; si tu felino suelta restos de mucosidades ya sea en las paredes o en el suelo, limpia los utilizan do alcohol, clorox o jabón líquido.
5) por último, si tu felino disminuye el apetito, ponle a su disposición comida hecha en casa para felinos, comida enlatada o comida para bebés que tenga carne. De esta forma, vas a lograr que tu felino coma, porque las opciones mencionadas son blandas y muy ricas, y obviamente tienen mejor aspecto que el pienso.
Si el felino sigue evitando la comida, dile esto al veterinario. Ya que te dará medicamentos para que su apetito se estimule. Aparte, te puede dar la opción de alimentar a tu felino a través de una jeringa grande, en la que vas a introducir comida hecha en casa machacada y mezclada con agua, para que tenga aspecto de compota.