Abrigos Para Ayudar Pingüinos
Conozca la historia de Un Hombre Teje Pequeños Abrigos Para Ayudar Pingüinos, él es Alfred Date y efectúa una muy importante acción a sus ciento nueve años de edad, y está comprometido con las aves palmípedas que fueron perjudicadas por el petróleo vertido en Phillip Island. Alfred tiene habilidad para hilar suéters, y eso es lo que hizo para ayudar a estos pingüinos.
Hombre Teje Pequeños Abrigos Para Ayudar Pingüinos
Una hermosa historia
Esta historia empieza en el 2013, en el instante en que la Phillip Island’s Peguins Foundation necesitaba voluntarios para asistir a estos pequeños animales que viven en N. Zelanda y están enfermos a raíz del petróleo vertido en el sur de Australia.
Alfred decidió cooperar de la manera en que mejor sabe hacerlo. Había aprendido a hilar en 1932, elaborando un suéter para su sobrino recién nacido, y vio la posibilidad de alterar las medidas de sus creaciones para amoldarse a las aves palmípedas. Con la edad, Alfred ha ido perdiendo la habilidad de sus manos, pero cada prenda quedó perfecta.
El suéter preciso para los pingüinos
En el instante en que los pingüinos perjudicados por los derrames de petróleo llegan a la fundación, se les da un suéter a fin de que el aceite no se agarre a sus plumas. En el 2001 un total de cuatrocientos treinta y ocho aves quedaron perjudicadas en un derrame en Phillip Island, donde viven frecuentemente una colonia de más de treinta y dos ejemplares de pingüino, y merced a los trajes de punto, cerca del noventa y siete por ciento de estas aves pudieron rehabilitarse.
Más personas en la iniciativa
Alfred Date, que tiene siete hijos y veinte nietos, no fue la única persona en cooperar en esta iniciativa. Cientos y cientos de personas en el mundo entero lo prosiguieron, en mayo del 2014, debió solicitar a los voluntarios que dejasen de mandar ropa, puesto que ya había bastante.
Como acostumbra a suceder, hay ideas siempre y en toda circunstancia para todos y cada uno de los gustos, y ciertos especialistas no estaban de acuerdo con esta iniciativa, argumentando que estas prendas pueden agobiar mucho a los pingüinos, en tanto que son animales salvajes que no han tenido ningún género de interacción con los humanos.
Pese a estas creencias contrarias, la realidad y los datos logrados en el proyecto han probado lo opuesto en lo que se refiere a la utilidad de estos suéteres, puesto que se ha salvado la vida de muchos de estos pequeños animales.
En un comienzo era grande la preocupación por estos prácticamente quinientos animales perjudicados. Es una enorme satisfacción para el planeta entero poder aseverar que se ha salvado la vida de ellos.
El efecto que hace este producto en los pingüinos es separar sus plumas, lo que hace que el animal se vuelva muy pesado. De este modo les cuesta apresar su comida, de forma tal que mueren de apetito. Además de esto, al limpiarse con el pico, van ingiriendo todo género de substancias tóxicas.
Los patrones de los suéteres se han ido efectuando de manera que no se dañe el plumaje ni se provoque que sus aletas y picos se queden enredados. Las prendas son de lana pura, de forma tal que las aves marinas pueden sostenerse cálidas sin peligro de calentarse, y posiblemente respiren bien mediante ese material.
La lana asimismo puede absorber algo de petróleo, con lo que las substancias tóxicas que llegarían a la piel de los pingüinos serían escasísimas.
Un hombre Teje Pequeños Abrigos Para Ayudar Pingüinos
Sobrante de prendas
Las prendas que no sirven para la rehabilitación se han ido poniendo a pingüinos de peluche, que después son vendidos para colectar fondos. La cantidad conseguida se destinará a diferentes proyectos de conservación e investigación. Este inteligente empleo de los recursos ha generado una interesante ganancia para que se pueda re-invertir en nuevos avances para favorecer a los animales más necesitados.